Ingredients
-
4 Patata
-
2 Zanahoria
-
1 cebolla
-
150g Tomate frito
-
1-2 Chorizo
-
2 cucharadas Aceite de oliva
-
al gusto Sal
-
al gusto Pimienta
-
una cucharita Perejil seco
-
Opcional
-
media taza Quinoa
Directions
Sobre las patatas ya hemos hablado en más de una ocasión. Un alimento que ha significado mucho en la alimentación del mundo y que se presta a más elaboraciones que ningún otro alimento.
Por ahora nos vamos a quedar en las manos de madres y abuelas que han guisado para nosotros desde siempre. Y yo lo aprendí de ellas.
Pero los tiempos cambian. Ahora mi hijo se interesa por lo fogones y se enfrasca en inventar recetas cada vez que me pilla en un despiste. Y tiene que hacerlo casi a escondidas porque soy muy posesiva en mi cocina, y aunque la primera lección fue sobre como cuidar los cacharros y utensilios, temo que la innovación no pase por usar una cuchara metálica en mi sartén viajera 😨.
Querido hijo y sarteamigo, en la cocina aún hay mundos por descubrir, son todos tuyos, pero hay que empezar por lo básico, conocer los ingredientes, cuidarlos, mimarlos y todo saldrá perfecto. El amor en la cocina es ese ingrediente secreto que llevaba la comida de nuestra infancia.
Aprendamos a utilizarlo y veremos el cambio. ¿Y que mejor que practicar con un guiso rico, que sale casi solo?
¿Nos ponemos a ello?
Steps
1
Done
10 min
|
La preparación1. Limpiamos la cebolla y la cortamos en juliana fina o en dados pequeños. |
2
Done
20 min
|
El guiso1. Ponemos a calentar el aceite en una sartén honda (mi querida wok, puede con todo) o cazuela. |
3
Done
2 min
|
Toque final |