Acampada: Mi manera de empezar
Si eres de los que nunca se han planteado ir de camping pero te ha entrado el gusanito para probar, ¡enhorabuena!, los próximos post te ayudarán para que veas un poco el conjunto de por dónde empezar.
Los ingleses tienen un dicho: «If there is a will, there’s a way!» que viene a decir algo así como que «si existe la voluntad, existe la manera» y tu acabas de dar el primer paso hacia ello.
Cuando empecé en el camping, hace muchos años ya, iba con mi marido a un mismo sitio, en la montaña, al lado de un río y con la carretera muy cerca. Era nuestro sitio, así lo llamamos, ya que fuimos unos 4 años seguidos.
Un lugar idílico donde los haya, donde estaba permitido hacer fuego y acampar libremente.
En esa época, (¡llegando a los 20 años!), no se nos pasaba por la cabeza llevarnos hornillo de gas ni nada por el estilo, sólo dependíamos del fuego que encendíamos y de la comida que llevábamos. Normalmente el primer y segundo día hacíamos barbacoas de carne y verduras y, como la caza no es lo nuestro 😉 , terminamos nuestra aventura con sopas de sobre y conservas. ¡Que bien nos sabían!
¡Que recuerdos aquellos! La tienda: prestada, vajilla de plástico y una olla de la abuela. Sin electricidad. Sin vecinos. Agua del arroyo para beber, el río para bañarnos, moras y frambuesas del bosque para endulzarnos y a la cama antes del anochecer.
Me acuerdo que una vez la lluvia nos mandó al otro lado del río, debajo de unas ramas para poder encender un fuego y calentar el agua para una gloriosa sopa de fideos. Nos costó mucho pero finalmente lo pudimos encender y calentamos el agua. Nos tomamos la sopa allí mismo, debajo de las ramas. Inolvidable.
Pasaron unos años en los que los viajes tomaron otro rumbo pero cuando ya pudimos llevarnos a los niños, empezamos a salir otra vez, ya solo en camping, primero con una VW Transporter Westfalia que tenía 3 filas de asientos, una mesa entre las dos filas traseras, una cama extra en el techo y la gran cama en la que se convertía la parte trasera una vez tumbado el respaldo de los asientos traseros. En aquella cocinaba en una plancha. Es increíble lo que da de sí pero llega un momento que te limita bastante. Eso sí, más sana, imposible.
Cuando tuvimos que vender ese coche, con los niños un poco más mayores pasamos a una tienda tamaño familiar que todavía conservamos y con la que nos escapamos a veces. La hemos paseado por muchos sitios en España, Italia, Francia y nos ha ido genial con ella. Ese fue mi paso a la sartén eléctrica, que me hacía de plancha, olla, sartén y casi horno. El abanico de posibilidades que se abre con ella en cuanto a la comida, es brutal. (y para muestra, el recetario de este sitio 👌)
Y ya que este estilo de vida nos gustaba tanto, los astros se alinearon para que diéramos el siguiente paso. Una autocaravana. Será que nos estamos haciendo mayores, que queremos explorar otros límites, no lo sé pero es genial. Para cocinar es muy parecido a la sartén eléctrica pero en gas, lo que te da más autonomía ya que no dependes de la red, y tienes una nevera incorporada, y alguna comodidad más.
Lo que quiero decir con toda esta historia es que si te apetece empezar no hace falta que te rompas mucho la cabeza la primera vez que vayas. Prueba con un fin de semana antes de lanzarte a una o dos semanas y busca un sitio en el que tengas de todo (o casi). Así te será más fácil adaptarte a este estilo de vida.
Conozco personas que han ido por dos semanas de camping, por primera vez en sus vidas y han acabado aborreciendolo. Busca sitios con encanto y/o un buen entretenimiento, así tendrás tiempo para adaptarte y contagiarte. Hay muchos camping que tienen unas instalaciones buenísimas y unos espectáculos increíbles, actividades para niños (por edades) y adultos, supermercado, bar y hasta los hay que ofrecen media pensión. Vamos, como para olvidarte de la playa o la montaña que tienes al otro lado de la puerta. Si tus circunstancias te lo permiten, es mejor que alquilar un piso y buscarte la vida para entretener a los niños a partir del día 4 cuando empiezan con el “otra vez playa?”
En el siguiente post encontrarás el equipo básico que se necesita para arrancar. Sale de mis «super listas» para no olvidarnos nada y ¿sabes que? A mi me basta. ¿Tu te animas?